Las mentiras de la Evaluación Docente





Resulta incomprensible para muchos, para mí entre ellos, he de confesarlo, pero es cierto que nuestros políticos siguen al pie de la letra las enseñanzas de Goebbels, el tristemente célebre propagandista de Hitler, y piensan que repitiendo una mentira mil veces la convertirán en verdad.

Ahora han anunciado que el “exitoso” sistema de insaculación mediante software implementado en Sinaloa fue replicado en otros estados y ahora ya se cuenta con la designación del 90% de docentes que participarán en el próximo proceso de evaluación del desempeño para garantizar su permanencia, en el tercer grupo para ser exactos, gracias a este sistema.

El compromiso es que el día de mañana, 15 de junio, se deberá empezar a notificar a los seleccionados, según nota publicada en el periódico La Jornada, firmado por Laura Poy (prestigiosa y muy entendida periodista en la fuente educativa) quienes “serán evaluados en noviembre próximo” (sic). Desde luego esta es la información que la SEP proporciona, lo que no dice es que el proceso de evaluación NO inicia en noviembre, de acuerdo al propio calendario de INEE, sino a partir del 1º. De septiembre con el diseño de la planeación didáctica que forma parte de la etapa 1, Proyecto de Enseñanza, y cuya metodología específica se desconoce hasta el momento ya que las guías técnicas y académicas todavía no se encuentran disponibles.

Es claro que esto incumple con los lineamientos expedidos por el INEE pues se especifica en ellos que los materiales deberán estar disponibles 3 meses antes del inicio del proceso. Como suele suceder las fechas, datos y cifras se manipulan a conveniencia.

Esperemos que, como se anunció, por lo menos los designados para participar de manera obligatoria en este proceso sean notificados en estos días, de lo contrario también se estará incumpliendo con ese mandato legal y por tanto se propiciarán serios daños a los que han sido seleccionados, pues contarán con muy poco tiempo para prepararse.


Desgraciadamente vivimos en el país de “No pasa nada” y si estas condiciones no cambian en breve seguramente pocas y solitarias voces se levantarán para denunciar o demandar una solución al problema. “Divide y vencerás” desde luego es otra de las máximas con las que operan nuestros políticos y funcionarios, así que, lo más probable es que la apuesta sea porque los maestros, agotados y ávidos de unos cuantos días de vacaciones después de todo un ciclo escolar, tomen su receso y se olviden del tema, mientras tanto la maquinaria sigue caminando y las condiciones que las propias autoridades educativas imponen no son cumplidas… ya veremos dijo un ciego.

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