Los nuevos subdirectores o de cómo la empresa avanza en educación
Como se anunció hace unas cuantas semanas, el
todavía reluciente secretario de educación Aurelio Nuño dio a conocer lo que,
se supone, serán las 6 acciones que ubicarán, según su dicho, “La escuela al
centro” (lo cual, per se, hace retroceder los planteamientos pedagógicos unos
cien años, pero eso lo analizaré en otra entrega). Entre estas acciones se
habla de la figura del subdirector académico y del subdirector administrativo,
igualmente se afirma que cada supervisor sólo contará con 6 escuelas en su
zona, todo ello con la intención de “descargar” burocráticamente a la escuela;
aunque hay otros puntos importantes me gustaría hablar sobre este específicamente:
la creación de nuevas figuras encargadas de la administración y de la
planeación académica en cada plantel. Surgen, desde luego, muchas preguntas,
algunas de ellas serían: ¿De dónde saldrá el presupuesto para pagar a estas
nuevas figuras en el organigrama escolar? ¿Las escuelas unitarias y multigrado,
que apenas cuentan, si bien les va con un docente que hace las veces de
director y uno o dos profesores, también están contempladas dentro de este
esquema? ¿Cómo se definió el perfil de estos dos nuevos actores escolares?
Hay que ser muy claros porque la información
se ha manipulado a diestra y siniestra y se ha anunciado con bombo y platillo
que para este año, 2016, el presupuesto para educación se ha visto beneficiado,
lo cierto es que en el proyecto de presupuesto se presentó un monto de $299,359
mdp, lo que significaba un recorte, respecto al 2015 donde el presupuesto
destinado a educación fue de $305,057 mdp, de $5,698mdp; al final de los
debates la cámara de diputados aprobó un presupuesto superior, en total son
302,986mdp, lo que significa, efectivamente un aumento en el proyecto
presentado, pero no con respecto a lo destinado el año anterior, es decir, el
recorte presupuestal viene por $2,071mdp, lo cual significa que de algún lado
deberá recortarse este déficit ¿cómo podrán, entonces, en los 207,683 planteles
de educación básica*, sumarse estas dos figuras nuevas con un nivel de
subdirectores? Estaríamos hablando de más de 55,000 nuevos empleados que, de
confianza o de base, pasando por examen de oposición, licitación o elegidos por
el famoso método del “dedazo” o compadrazgo significarían por lo menos una
erogación de $13,287 mdp para este ejercicio fiscal, ya que, según la propia
SEP un subdirector gana entre $20,00 y $56,000 mensualmente. Desde luego esto
ya nos esclarece que el panorama no es tan sencillo.
Tampoco podemos perder de vista que de la
noche a la mañana, y después de tres años de amenazas constantes, el SNTE ha
sido desposeído de miles de “comisionados” que cobraban en SEP y servían en el
sindicato, ahora, según declaraciones de su líder, estos maestros regresarán,
después de 5, 10 o hasta 25 años de haber salido del aula, a sus respectivas
plazas frente a grupo. Esto resultaría en una verdadera debacle, lo cual me
lleva a pensar que muchos de estos comisionados terminarán ocupando estas dos
figuras a modo.
Aclaremos, no es mala idea desde luego que
las escuelas reciban esta tan anhelada ayuda para su descarga administrativa,
lo cierto es que un director tiene millones de cosas de las cuales ocuparse y a
duras penas puede elaborar un presupuesto, es común, por ello ver, a final de
cada ciclo, miles de directores corriendo para conseguir comprobantes de pagos,
facturas, destinando presupuestos excedentes al vapor o regresando de su propia
bolsa los faltantes. Por el propio sistema de elección de los directivos hasta
ahora, se ha posibilitado que, teniendo buenas relaciones con el sindicato un
maestro frente a grupo acceda a este tipo de puestos, pero la experiencia, poca
o mucha, que hubiesen generado en el ejercicio docente, no les brinda ni de
lejos las competencias necesarias para ejercer un liderazgo pedagógico
efectivo. Así pues estos dos nuevos puestos, si hubiera condiciones para que se
integraran a las instituciones educativas, serían de mucha ayuda, pero aquí
viene la realidad, en primer lugar, como ya he expuesto, no hay presupuesto
para ello.
Intentando contestar la segunda pregunta, en
este universo que he mencionado de más de 200 mil planteles de educación básica
en el territorio nacional, están contempladas las escuelas unitarias y las
multigrado que llegan a ser, según datos publicados por INEE en el documento
“Panorama educativo de México” un 44.4% pertenecen a esta modalidad. Si apenas
alcanza para un docente o tres a lo sumo ¿se integrarán dos nuevos puestos en
lugar de proveer de docentes de los grados requeridos? En México es recurrente
que los grupos se queden sin docente por largos períodos, que se esgriman
millones de razones que siempre redundan en la misma: no existen suficientes
docentes para cubrir la demanda, entonces ¿los comisionados llegarán a estas
comunidades a “poner orden”? reconozco que muchos de ellos poseen una amplia
experiencia y conocimientos en las áreas de gestoría y “tramitología” pero eso
no los convierte en automático en los idóneos para las funciones que se
requieren. Aunque desde luego, según los rumores, esto ya está negociado con el
sindicato y los comisionados serán ubicados, de manera preferente, en estos
nuevos puestos.
Dejo para el final la pregunta que sería
sustancial contestar ¿cómo fueron definidos los perfiles? Acabo de conocer a un
consultor de empresas por demás brillante y reconocido en el norte del país y
me comentaba que hace algunas semanas fue convocado por la SEP a una reunión
que hubo en Guanajuato donde se consultó a varios “expertos” para la definición
de estos perfiles, en su mayoría es gente que viene de la empresa, que son muy
buenos en sus ámbito pero que (no es el caso de este personaje) desconocen la
realidad de lo que sucede en la escuela. Este grupo de expertos citados en “lo
oscurito” son los que definieron los perfiles. Y esta ha sido otra puerta que
abre SEP para que el empresariado mexicano tome las riendas del ámbito
educativo, ya no solamente se trata de concesionar escuelas o vender bonos
educativos al mejor postor, ahora se introducirán estas figuras bajo la
perspectiva de una lógica empresarial.
Bueno para todos aquellos que siguen
defendiendo que la escuela pública no se privatizará, esta es una muestra clara
de ello, así que antes de echar las campanas al vuelo sería bueno analizar con
detenimiento cada uno de los seis puntos expuestos en el nuevo decálogo (porque
si, efectivamente un decálogo puede tener más o menos puntos que diez) del
secretario Nuño.
Nos leemos en la próxima.