Los foros simulados
En el 2013 y parte del 2014 se llevaron a cabo una serie de foros de
consulta en las llamadas 5 regiones del país; estos foros estaban encaminados
al convencimiento de directivos y mandos medios de que la reforma educativa era
la mejor opción para nuestro país en ese momento y fueron organizados en
conjunto por el Consejo Nacional de Participación Social en la Educación
(CONAPASE) y las secretarías de educación de los estados, tuvimos la
oportunidad de participar en tres de ellos, en la Ciudad de México, en Mazatlán
y en Mérida. Ahora que se avecina una avalancha de “foros de consulta” me
gustaría compartir mi experiencia y contrastarla con las referencias que me han
hecho el favor de compartir muchos docentes con respecto a los foros de
consulta de la reforma del modelo educativo y la reforma a las escuelas
normales.
La invitación llegó y nos sentimos agraciados
ya que sólo participaban otras tres organizaciones: una organización
internacional con representación básicamente de Estados Unidos dedicados a la implementación
de diversas estrategias didácticas; CREFAL y otra organización dedicada al
aspecto tecnológico (gran vendedora de tabletas para el nivel básico); nosotros,
que resultamos ser los incómodos del grupo, enfocados a la construcción de paz
en el aula y cuestionando a los funcionarios acerca de la eficacia y las
intenciones de, en ese entonces, nueva reforma que no contaba (y sigue sin
contar) con componentes pedagógicos, pero, he de reconocerlo, tuvimos grandes
aprendizajes en esa experiencia.
Los traslados fueron cubiertos por la SEP y
fuimos hospedados en hoteles de lujo, con todo incluido, nos trataron, eso si
debo decirlo, a cuerpo de rey, muy atentos, tanto los representantes de las
secretarías locales como los encargados logísticos y desde luego el personal de
CONAPASE. Llamó mi atención, por ejemplo, que el evento de la Ciudad de México
tuvo, dado el número de escuelas que se encuentran en la capital del país,
apenas un pequeño auditorio con directores, coordinadores y algunos
supervisores que no pasaron de 200. El discurso y la mecánica se repitieron en
Mazaltán, aunque se rentó el Centro de Convenciones del puerto, lo cierto es
que no llegaron a 200 participantes, eso sí, se brindó comida tipo buffet para
todos y a algunos de los directivos se les cubrieron los traslados y
hospedajes, dependiendo del lugar en el que se encontraban puesto que se
trataban de foros regionales. La historia se repitió en Mérida, donde el
auditorio no pasó de 200. El comentario recurrente entre los participantes era
“somos muy pocos, el año pasado fuimos casi mil” o frases por el estilo;
platicando con varios de ellos me quedó claro que la invitación fue enviada de
manera selectiva, escrutando a quienes tuvieran alguna simpatía por el gobierno
en turno o hubiesen manifestado su interés de colaborar con la nueva reforma.
Es decir, los foros se hicieron a modo y fueron
todo menos foros de consulta; la estructura era: 1) presentación por parte del
secretario estatal; 2) conferencia del coordinador de la oficina de vinculación
y planeación de la SEP federal; 3) conferencia de la secretaria ejecutiva de
CONAPASE; 4) Presentación de los proyectos por parte de las Organizaciones
participantes. Al final se abría un pequeño espacio para preguntas, de unos 20
minutos y así culminaba el evento. Era más un acto proselitista avalado por
organizaciones sociales que fuimos invitadas para exponer nuestros “servicios”,
que un diálogo abierto con los participantes, mucho menos se les consultaba qué
les parecía el planteamiento central, es decir, la autonomía escolar. Así se
gastaron recursos y se “recorrieron” las 5 regiones del país que en realidad a
duras penas enviaron unos 30 representantes por estado, aunque el estado
anfitrión siempre tuvo mayor representación. No hubo conclusiones, no hubo
propuesta, no se escuchó a los participantes, en fin, fue una exhibición
proselitista que se diluyó entre el mar de “encuentros” que lleva a cabo cada
año la secretaría de educación.
Según referencias de los participantes de otros
foros, por ejemplo, de los de consulta del “modelo educativo” llevados a cabo
en el 2014, la dinámica fue diferente, pero aunque se presentaron ponencias lo
cierto es que, para variar, los funcionarios estuvieron sólo en la
inauguración; supuestamente se recopilaron y analizaron las cientos de
ponencias presentadas pero el resultado ha sido el mismo que con los foros de
participación social y hasta el momento los encuentros realizados con docentes
representantes de academias, coordinadores y directores de las escuelas normales
del país han mantenido ese tenor. Ahora la expectativa es que se realizarán
nuevamente los foros de consulta con la “nueva propuesta” de “Escuela al
centro” que no es más que la versión propagandística del mismo discurso
realizado por SEP desde principios de 2013 ¿Será esa la verdadera respuesta?
Hoy se entregó una carta firmada por casi 8 mil profesionales de la educación
al Secretario de Educación donde se reclama la participación real de los
educadores en el proceso de conformación del supuesto y hasta hoy inexistente
“nuevo modelo educativo”, la modificación de la reforma educativa y el cambio
de rumbo, drástico, de la evaluación docente ¿Habrá respuesta? No sabemos, lo
que si sabemos es que, por las recientes señales en la “arena política” quizá ya
se hayan dado cuenta (por lo menos algunos políticos) que el rumbo de la
simulación sólo los está llevando a un callejón de una única salida: la
respuesta violenta de la población.
Ya veremos, dijo un ciego...